¿Debería Esterilizar A Mi Perro?

Cuando hablamos de esterilizar a nuestra mascota, generalmente nos referiremos a la castración, e implica extirpar los testículos al macho o los ovarios y útero a la hembra. Se trata de una operación que aunque en un principio puede parecer cruel e innecesaria, es muy aconsejable y no va a causar ningún perjuicio a nuestra mascota. La pregunta es Debería Esterilizar A Mi Perro:

Muchas veces tendemos a humanizar en exceso a nuestros perros, y les atribuimos características humanas que no tienen. Mucha gente tiene reparos a la hora de recurrir a la esterilización de sus perros, pensando que les van a privar de disfrutar de su sexualidad, o de realizarse teniendo descendencia. Sin embargo, tenemos que tener claro que son sólo perros. El acto reproductivo sólo es algo mecánico que realizan por instinto cuando están en celo, y sólo para garantizar el mantenimiento de la especie, no para obtener placer.

Si esterilizamos a nuestro perro, éste no va a cambiar su carácter. Seguirá teniendo sus defectos y virtudes, simplemente conseguiremos controlar mejor comportamientos no deseados. Tendremos una serie de ventajas, tanto en el caso de machos como en el de hembras.

Los perros esterilizados generalmente serán menos territoriales, estarán más tranquilos y serán menos agresivos. Evitaremos además que cuando se encuentren con una hembra en celo se escapen e intenten montarla. Son situaciones complicadas ya que su instinto puede ser más fuerte que todo nuestro trabajo de adiestramiento y ante una hembra en celo podrían incluso mostrarse agresivos con nosotros si nos interponemos. Es un problema que la esterilización eliminará de raíz.

En cuanto a las perras, conseguiremos evitar que entren en período de celo eliminando así los problemas que éste acarrea. Evitaremos que se la acerquen otros perros para intentar montarla, con el riesgo que puede entrañar para ella, así como embarazos no deseados. Eliminaremos además el sangrado que se produce durante el celo, y que aunque no es muy abundante, puede provocar indeseables manchas en muebles o alfombras. Al igual que los machos, una vez esterilizadas, las hembras también se mostrarán más tranquilas y obedientes.

En ocasiones, la esterilización puede hacer a nuestro perro más propenso a coger peso. Generalmente, esto sucede porque como hemos dicho los perros esterilizados son más tranquilos, tienen menor actividad y si siguen comiendo lo mismo que antes tenderán a engordar. Es importante por tanto prestar cuidado a una correcta alimentación y vigilar que realicen un nivel adecuado de ejercicio cada día.

En definitiva, se trata de una operación sencilla y económica que no debe darnos miedo llevar a cabo, ya que obtendremos grandes beneficios, y en ningún momento tendrá consecuencias negativas para nuestra perro.